El hotel era un buen lugar para quedarse. Gozaba de una zona segura. En las inmediaciones de tiendas de conveniencia y bares. La cama era cómoda. El baño muy limpio. Había una caja fuerte personal, una nevera, una plancha y tabla de planchar en la habitación.

Habitaciones sorprendentemente nuevas y bien cuidadas, tuve una experiencia muy buena.

La ubicación era ideal, el Century City Mall está a dos pasos. Habitaciones con una buena vista.

La vista era estupenda, el desayuno excelente y las camas súper cómodas. Las habitaciones eran ordenadas y elegantes, tenían una caja fuerte, una nevera, una plancha y tabla de planchar. Hay una bañera en el baño. Una ubicación estratégica cerca de todo, fácil para salir por ahí. Además, estaba a pocos pasos de los medios de transporte y de un taxi. La experiencia general ha sido agradable, recomendaría el lugar sin duda alguna.

El hotel St Giles en Makati en Manila ofrece vistas increíbles de la ciudad. Su ubicación es ideal, cerca de un centro comercial, un mercado de alimentos y cafeterías.

El personal fue super amigable y atento con todos, ¡súper agradable! La habitación estaba ordenada y elegante, con una linda vista y una cama grande y cómoda. ¡Todo fue genial! 🌟

El hotel estaba ordenado, la gente era responsable y muy respetuosa. La habitación era bien cuidada y ordenada, con bonitas vistas y una cama de matrimonio. La ubicación es estratégica y cómoda, muy cerca de los centros comerciales, del distrito comercial, de la vida nocturna. El parking gratis fue un bonus excelente, y además estaba muy cerca del aeropuerto. No tengo ninguna queja en absoluto, me ha encantado todo, recomendaría este lugar.

Nuestra estancia en este hotel fue genial! ¡Fue una experiencia alucinante correr en karts a toda velocidad en un circuito de 650 metros! Además, el hotel era perfecto para jóvenes como nosotros, con habitaciones limpias y cómodas. Realmente disfrutamos de nuestro tiempo en Manila gracias a las ubicaciones y actividades increíbles que ofrece la ciudad.

La única cosa que pediríamos es que el hotel tuviera una discoteca o algún tipo de espacio de fiesta para los jóvenes como nosotros. Después de un día lleno de emociones, nos hubiera encantado tener un lugar cerca para salir y disfrutar de la vida nocturna de Manila.

Año nuevo en este hotel fue una gran experiencia. Lo mejor fue disfrutar de una cena gratuita en el restaurante de la azotea con una terraza y vistas impresionantes de la ciudad. Además, el hotel está muy bien ubicado, con acceso rápido a las atracciones principales de la ciudad. Otro aspecto positivo fue la amabilidad y atención del personal del hotel.

El hotel deja mucho que desear en algunos aspectos. Los pasillos tienen un olor desagradable y se ven anticuados.

Las habitaciones tienen una cama grande y cómoda. 🛏️ La ubicación es genial, rodeada de un montón de restaurantes, un mercado de alimentos y varios centros comerciales. Además, el restaurante está a menos de 200 metros de distancia. ¡Ideal para explorar y disfrutar de la ciudad sin tener que desplazarte demasiado!

La ubicación y la variedad del desayuno fueron excelentes.

Me sentí muy bien, no tengo ninguna razón para quejarme.

Las habitaciones tienen una buena vista, una cama de matrimonio, cafetera/tetera y nevera, además el servicio es educado.

Este hotel es una joya escondida en medio de la ciudad. Está ubicado en un barrio seguro, lo cual es un gran alivio para los viajeros. Además, el precio es increíblemente bueno para todo lo que incluye. Las habitaciones son cómodas, con camas de matrimonio y excelentes vistas. Me encantó cómo estaban en buen estado y bien cuidadas. me impresionó la amabilidad y el servicio del personal. Realmente se preocuparon por cada detalle y hicieron que mi estancia fuera muy agradable. Por último, el desayuno estaba incluido y tenía una gran variedad de opciones para todos los gustos.

Todo estaba bien.

Este lugar cuenta con unas vistas increíbles de la ciudad, un equipo muy amable y servicios excelentes que incluyen una deliciosa variedad de comida.

Limpieza impecable, excelente atención, piscina accesible, ubicación conveniente cerca del aeropuerto.

Nada que decir.

Quería visitar el Monumento de Sultan Kudarat en Manila y elegí el St Giles Hotel Makati por su ubicación conveniente. Sin embargo, me sorprendió gratamente el equipo de especialistas en grupos experimentados del hotel que se aseguraron de que todo saliera bien. Su consulta personalizada, apoyo audiovisual y técnico, catering gourmet y servicios de banquetes personalizados fueron excepcionales. Además, me encantó la amplia variedad de cócteles refrescantes, cervezas frías, vinos y aperitivos antes y después de la cena que ofrecían.

La limpieza del hotel deja mucho que desear: pasillos con olores extraños y desactualizados, fundas de almohadas sucias y con olor a uso previo , pelos en el baño como si alguien se hubiera afeitado y marcas de dedos en uno de los espejos de la habitación. Además, la recepcionista fue inflexible ante mi solicitud de tomar una ducha al recoger mi equipaje, a pesar de que tenían un baño con ducha en la terraza.